El trigo sarraceno es conocido por no tener gluten, pero tiene más propiedades nutricionales. Descúbrelas y aprende a cocinarlo con estos consejos.
Seguramente habrás oído hablar del trigo sarraceno, ese alimento que cada vez está más de moda, aunque las personas que siguen una dieta sin gluten ya lo conocen. ¿Pero sabes realmente qué es? ¿En qué se diferencia del trigo convencional? Si estás pensando en incluirlo en tu dieta, ¡te vamos a explicar todo sobre este pseudocereal para que puedas disfrutarlo!
El trigo sarraceno, ¿qué es?
También se le conoce como alforfón. Aunque puedas pensar que es un cereal más, técnicamente este alimento es más bien un pseudocereal. Este grano no pertenece a la familia de las gramíneas, de la cual son la mayoría de los cereales. El alforfón pertenece a la familia de las “polygonaceas” y si miras detalladamente su forma, es más parecida a una pirámide. De ahí el nombre botánico.
El origen del trigo sarraceno
Este pseudocereal, que cada día está presente en más y más hogares, tiene su origen en Asia central. Se estima que se empezó a cultivar hace más de 7000 años, lo que le convierte en uno de los primeros granos en cultivarse. De ahí se fue abriendo paso poco a poco hasta que, en el siglo XVI se consolidó en la agricultura europea. Antiguamente era un alimento que se utilizaba más para la alimentación del ganado que para el consumo humano. No obstante, los campesinos sí lo utilizaban en su alimentación. De ahí que nos hayan llegado algunas de las mejores recetas tradicionales donde se empleaba este cereal. Por ejemplo, gachas, crepes, polenta o soba (los fideos orientales), entre otras recetas de antaño.
Hoy en día, aunque en los últimos años ha perdido protagonismo, vuelve a estar de moda entre la alimentación del mundo. Se ha convertido en un producto muy preciado por todos los beneficios que aporta a nuestra dieta.
Beneficios del trigo sarraceno
Este pseudocereal tiene un valor nutricional superior a la mayoría de los cereales. Se diferencia de estos en varios aspectos. Una de las cosas que lo hace tan atractivo para un gran número de personas, es que es un alimento sin gluten.
El trigo sarraceno está compuesto mayoritariamente por hidratos de carbono complejos y proteína vegetal. También contiene fibra y micronutrientes (vitaminas y minerales) de interés.
Trigo sarraceno y proteína vegetal
Posee un mayor número de aminoácidos esenciales comparado con la mayoría de los cereales, lo que le hace destacar por encima de ellos. En concreto, aporta un 13% de proteínas en su composición, según datos de FoodData Central de la USDA (United States Department of Agriculture). Eso sí, dentro de la proteína no aparece el gluten, como ya hemos comentado.
Fibra, vitaminas y minerales del trigo sarraceno
Contiene 10g de fibra por cada 100g. Un nutriente esencial para el buen funcionamiento digestivo y para regular tanto los niveles de azúcar como de grasas en nuestro organismo. Nada mal, si contamos que diariamente, deberíamos consumir unos 25-30g de fibra. Y es que el trigo sarraceno es un grano completo, no refinado, que conserva su fibra original. De ahí que sea tan interesante incluirlo en nuestra alimentación.
Aporta también vitaminas y minerales, entre los que destacan:
- Vitaminas: ácido pantoténico o vitamina B5, riboflavina y niacina.
- Minerales: magnesio, hierro (no hemo), zinc, cobre y selenio.
Por todo ello, el trigo sarraceno es un alimento muy interesante que no debes dejar de incluir en tu alimentación. ¿Sabes cómo hacerlo? Te damos algunas ideas a continuación.

Ideas para cocinar que se pueden hacer para incorporar el trigo sarraceno en tu alimentación
Ideas de recetas con trigo sarraceno
El trigo sarraceno permite varias técnicas de cocción, y tiene distintas presentaciones. Si no sabes cocinarlo o necesitas inspirarte, te damos algunas sugerencias:
Cocinar el trigo sarraceno
- Hervirlo es la manera más sencilla de cocinar este alimento tan preciado. Se recomienda lavar los granos de trigo sarraceno con un colador, y posteriormente tostarlos ligeramente (2-3 minutos) sin aceite en la olla donde vayamos a cocinarlo. Luego, hay que añadir 2-2,5 volúmenes de agua por 1 volumen de grano, y dejar que se cocine hasta que el agua se haya evaporado.
- Para acortar la cocción, puedes hidratarlo durante 12h y luego hervirlo durante 10 min cambiando el agua, y ya estará listo para comer.
Recetas con trigo sarraceno
- Una vez hervido, puedes saltearlo en un wok o sartén con verduras. Sin duda un plato muy completo ya que te aportará gran parte de los nutrientes necesarios.
- También puedes incorporarlo en un guiso o sopa, dándole un hervor final para que absorba bien los sabores.
- Otra manera de comerlo es en forma de hamburguesa vegetal. Por ejemplo, una Burger veggie de trigo sarraceno complementada al gusto: rodajas de tomate, hummus, semillas…
- Si usas harina de trigo sarraceno, puedes hacer unas deliciosas crepes. Mezcla la harina con agua hasta hacer una masa no demasiado líquida y bien ligada. Cocínala en una sartén engrasada con aceite de oliva, y rellénala al gusto.
Así pues, ya tienes una idea más detallada de los beneficios que aporta incluir este magnífico alimento a tu alimentación. ¡No esperes más para mejorar tu día a día!